jueves, 21 de julio de 2016

02. Wohin? (¿Adónde?) Versión Orquestal.

02. Wohin? (¿Adónde?)
W. Müller y F. Schubert.

               

  Comienza la historia del molinero y su viaje a un mundo cargado de nuevas sensaciones,  la ilusión por el conocimiento que todo aprendiz ha de tener, esa emoción ante lo desconocido, la sensación de libertad del caminante solitario con el apetito de explorar un nuevo mundo para él.


Ich hört' ein Bächlein rauschen
Wohl aus dem Felsenquell,
Hinab zum Tale rauschen
So frisch und wunderhell.

Escuché murmurar a un arroyuelo
que brotaba de la fuente montañosa,
y valle abajo sentía su corriente
tan fresca y cristalina.

Antes de que la palabra entre en acción, Schubert nos presenta con dos compases al arroyo, éste murmura en un compás de 2/4 en el que cada parte presenta 6 semicorcheas en la mano derecha del pianista, ésta es una de las muchas  maravillas de este ciclo, no solo es único en su estructura armónica, sino que da vida, con su estructura rítmica, a un personaje principal de la obra, el arroyo, que estará presente durante toda la obra en "dialogo" continuo con el molinero.

El murmullo es característico del género, expresa y presenta claramente la sutileza de la poesía más pura y natural, esto mismo ha de reflejar el interprete musical y el oyente, ha de notar la calma del murmullo generado por el arroyo que llama la atención a nuestro querido molinero, describiéndonos con pasión todo lo que él ve y nos  invita a analizar con nuestros ojos cerrados y a través de nuestros sentidos.

El agua, el susurro, la fuente montañosa, valle abajo… estos elementos nos indican que la naturaleza es la base del romanticismo... de nuestra esencia. En definitiva, el amor a todo lo que crece gracias a la fuente de toda vida, el agua, que como no podría ser de otra manera la describe como “tan fresca (un soplo de frescor a nuestro mundo) y cristalina (transparente)”.

Ich weiß nicht, wie mir wurde,
Nicht, wer den Rat mir gab,
Ich mußte auch hinunter
Mit meinem Wanderstab.
Hinunter und immer weiter
Und immer dem Bache nach,
Und immer frischer rauschte
Und immer heller der Bach.


No sé qué me pasó,
Ni quién me dio el consejo,
Tuve que descender
Con mi bastón de caminante.
Descender, y cada vez más lejos,
Y siempre junto al arroyo.
Que cada vez murmuraba
Más fresco y más cristalino.


                Cualquiera de ustedes se ha visto en esta situación de incertidumbre, en mi vida es casi diariamente, esa sensación en la que has de optar por uno de varios caminos y tomas la dirección que no sabes porqué pero decides tomarla, en este caso el molinero se agarra a la dirección que le marca su susurrante confidente, aunque esto le suponga un riesgo y un esfuerzo, él se deja llevar ante lo desconocido, ante la naturaleza y decide descender valle abajo junto al arroyo. El interprete repite dos veces Und immer frischer rauschte Und immer heller der Bach. (“Que cada vez murmuraba, más fresco y más cristalino.”), la segunda debería de ser más intensa en expresión. Toda la expresión del intérprete durante todo el ciclo Die Schöne Müllerin ha de estar al servicio de los sentimientos que, a su juicio, siente el molinero, y de esta manera hacer de su interpretación algo viva y única, puesto que única es su existencia e interpretación.

Ist das denn meine Straße?
O Bächlein, sprich, wohin?
Du hast mit deinem Rauschen
Mir ganz berauscht den Sinn.

¿Es éste, pues, mi camino?
Oh arroyo, dime, ¿Adónde?
Con tu murmullo me has
embriagado los sentidos.

                Al comienzo de esta estrofa la dinámica musical marca “pp” que dos indica una interpretación en piano (arroyo), para poder expresar cómo el molinero susurra al arroyo y lo hace su confidente, le pregunta ¿Adónde me llevas querido arroyo? (Wohin?), le ruega expresivamente y con vulnerabilidad que se lo muestre, una vulnerabilidad cargada de sensibilidad más cerca del alma que de la visceralidad humana; visceralidad de la que presume nuestro joven molinero en el primer lied del ciclo. Vulnerabilidad cargada de incertidumbre, como si su camino se cubriese de oscuridad, expresada con la armonía en las semicorcheas del arroyo (seisillos, grupos de seis notas por cada parte del compás); de esta manera y en, curiosamente 6 compases el molinero es consciente que una fuerza sobrehumana (magia del compositor F. Schubert) se apodera de sus sentidos.

               
Was sag ich denn vom Rauschen?
Das kann kein Rauschen sein:
Es singen wohl die Nixen
Tief unten ihren Reihn.

Más, ¿Qué digo murmurar?
Eso no es ningún murmullo,
Son las Ondinas que cantan
en lo hondo mientras danzan.

La voz de nuestro molinero en una ejecución vocal sutil, sensible y muy legato, nos ha de mostrar toda la musicalidad y expresión posible en la frase Es singen wohl die Nixen (Son las Ondinas que cantan). Según la mitología griega son ninfas acuáticas de espectacular belleza que habitan en los lagos, ríos, estanques o fuentes, mitad mujer y mitad pez. Esta es la magia que precede al “encantamiento” de nuestro sensible y emocionado molinero que lo predispone a abrir su alma a la pasión por la naturaleza y el amor.

Laß singen, Gesell, laß rauschen
Und wandre fröhlich nach!
Es gehn ja Mühlenräder
In jedem klaren Bach.
Déjalas cantar, compañero, déjalas murmurar,
Y sigue alegre tu camino.
Las ruedas seguirán moliendo,
con cualquier arroyo claro.


Tras muchas interpretaciones a este párrafo, me quedo con que sencillamente el molinero no se puede quedar únicamente con la idea de lo mágica que es para todos el poder de la naturaleza, sino que ha de seguir caminando y descubriendo, porque más adelante sabe que su viaje aún nos tiene mucho que enseñar. Según termina este lied, “Las ruedas seguirán moliendo, con cualquier arroyo claro” mi personal interpretación es que “la vida y el esfuerzo (ruedas) siempre prevalece con la presencia del agua que todo lo hace crecer”. Gran mensaje del profundo amor que todo romántico tiene por la naturaleza y que es tan importante para todos nosotros en nuestros tiempos.


Gracias por su tiempo
David Gascón Gallego
Barítono.

domingo, 3 de julio de 2016

Primera publicación en Internet de estreno de la Versión Orquestal "La Bella Molinera" F. Schubert.

Franz Schubert convirtió un mundo de poesía en música. Según Dietrich Fischer-Dieskau, en su publicación "Los lieder de Schubert":
"Por muy grande que sea la admiración que se sienta por él, solo en el futuro se descubrirá qué es lo que le otorga una clara primacía por encima de otros compositores. Schubert es “auténtico”, escribe como piensa, como siente, como habla… con un estilo natural, y esto es uno de los milagros de la música del genio"

Subscribo estas palabras y me llena de emoción haber publicado hoy las primeras notas de la primera y única versión orquetal hasta la fecha del ciclo de voz y piano, de La Bella Molinera de Franz Shubert.





Hoy, tras un estudio de años en este estilo, comienzo a contar lo que para mi significan cada uno de los lied, tras mi estudio de años de este estilo. Este ciclo lo he considerado como primer proyecto personal en sus distintas versiones (piano, guitarra y ahora orquetal) tras pasar por  estilos diferentes como la Ópera, Zarzuela y el Musical, a los que tengo un intenso cariño, respeto y admiración. Día a día intento interpretar los lied con la mayor naturalidad que el cuerpo y mi persona me permiten, aún me queda mucho trabajo, pero siento la necesidad de empezar a mostrar todo lo que han significado para mi a nivel personal, musical y artístico.





Muchos son los autores que han hablado sobre el ciclo de 20 temas, con estas publicaciones pretendo, con todo el respeto al estilo, autores, artistas, intérpretes e infinidad de versiones, aportar una visión personal sobre cada uno de los lied que esta maravillosa obra de arte presentada en forma de historia. Quiero aportar todos esos aspectos artísticos que, a al alma artística, han hecho vivir emociones y sensaciones, que me encantaría que todo el mundo asistente a las representaciones, conozcan. Gracias a ti por tomar tu tiempo en leer estos humildes aportes a esta maravilla en la fusión entre música y poesía.




Para Schubert, este lied constituye un verdadero prólogo al ciclo, dándole su significado. Es un lied estrófico con cinco estrofas idénticas, sencillez en el contorno melódico, en la estructura temática. Musicalmente presenta un bajo muy marcado, que simula la marcha del molinero, a un ritmo constante como las ruedas de las que posteriormente hablaré. En mi opinión, aunque la música se repita 5 veces, no tiene ningún sentido interpretar las 5 estrofas de la misma manera, cada una de ellas encierra una idea y como idea ha de interpretarse, esta idea ha de quedar clara.




                 Das Wandern ist des Müllers Lust
                Das Wandern!
                Das muß ein schlechter Müller sein,
                Dem niemals fiel das Wandern ein,
                Das Wandern.
¡Viajar es el placer del molinero,
viajar!
Muy mal molinero tiene que ser
aquél que nunca quiso viajar,
Viajar.


Viajar o caminar, ambos verbos valen aquí, ya que viajar hace alusión a lo que influyó y ocupó gran parte de la vida del compositor. “Viajar es el placer del molinero” el molinero es la expresión más viva de la visceralidad humana en esta historia, y por qué no decirlo de nosotros mismos con todos nuestros defectos y virtudes, por más que quiera el molinero entender la esencia del alma humana, es el encargado de vivir, es decir, “Viajar” por el mundo. “Muy mal molinero tiene que ser el que nunca quiso viajar” el compositor quiso empezar con este mensaje a modo de consejo para todos nosotros, haciendo uso del trabajo del poeta. La interpretación de esta estrofa tiene que tener un marcado carácter de alegría y de adolescencia, como si todo estuviera por descubrir pero consolidando el carácter de ser mayor antes de tiempo.
                Vom Wasser haben wir’s gelernt,
                Vom Wasser!
                Das hat nicht Rast bei Tag und Nacht,
                Ist stets auf Wanderschaft bedacht,
                Das Wasser.

¡Del agua lo hemos aprendido,
del agua!
No tiene descanso de día ni de noche,
siempre está intentando viajar,
el agua.


Aprendemos del agua, el agua es la fuente de toda la vida en nuestro planeta, su importancia es crucial en nuestras vidas. La intención de aprender de ella, nos lleva al entendimiento de que es el agua la que ha estado en todos los momentos felices y no felices de nuestra existencia, por eso lo de que no descansa y como consecuencia la vida en su interacción con la tierra. La interpretación de esta estrofa ha de ser tan fluida como el agua, es decir, técnicamente ligera en expresión, sin ningún peso y con un punto más de ritmo sin llegar a marcar demasiado los bajos, que significan los pasos del caminante y aquí estamo hablando del agua.


                Das sehn wir auch den Rädern ab,
       Den Rädern!
                Die gar nicht gerne stille stehn,
                 Die sich mein Tag nicht müde gehn,
                Die Räder.

¡Lo vemos también en las ruedas,
las ruedas!
Nunca permanecen quietas,
y nunca se cansan de girar durante mi jornada,
las ruedas.

Las ruedas, significan el esfuerzo y/o el trabajo, que todos los días hacemos para conseguir nuestros objetivos personales y laborales, y además si se paran, algo estamos haciendo mal; eso no es buena seña. ¿no crees?.  La interpretación ha de ser precisa rítmicamente (como una rueda que gira) y el intérprete ha de recordar el peso de su esfuerzo diario en cualquier aspecto de la vida, para ganar veracidad en su interpretación. Porque si algo ha de tener un intérprete de lied es veracidad en sus pensamientos y emociones, y sacarlos de su naturalidad.


                Die Steine selbst, so schwer sie sind,
            Die Steine!
                Sie tanzen mit den muntern Reihn
                Und wollen gar noch schneller sein,
                Die Steine.

¡Las mismas piedras, por pesadas que sean,
las piedras!
Danzan en alegre hilera
y quieren marchar más rápidamente,
las piedras.
 

Las piedras son  los problemas que nos impiden avanzar, a veces tanto que nos llevan a momentos de tensión. El intérprete (voz e instrumento) ha de mostrarlos matizando el acento de la palabra que siempre coincide con el acento de la música. Sobre todo en la palabra, Steine, ha de darle peso en la interpretación.
                O Wandern, Wandern, meine Lust,
             O Wandern!
                Herr Meister und Frau Meisterin,
                Laßt mich in Frieden weiter ziehn
                Und wandern.


¡Oh, caminar, caminar es mi delicia,
oh, caminar!
Señor molinero y señora,
dejadme marchar en paz,
y viajar.


A mi juicio, aquí significa caminar, el molinero se dispone, con ilusión y sonrisa en la cara, a caminar solo y descubrir, con interés científico-artístico, todo lo que le va a suceder en esta apasionante, historia poetizada llena de enseñanza y matices musicales, para que nosotros hagamos nuestra, porque así fué creada…

Gracias por su tiempo
David Gascón Gallego
Barítono.